«Volumen 2 Rock & Roll.

El Blues RockPlaneta-Agostini 1988

Rory Gallagher, guitarrísta blues, nacido el 2 de marzo de 1949 en Ballyshannon, Irlanda. Algo más joven que Al Kooper, creció en Cork, al suroeste de la isla, y considera a ésta como su verdadera ciudad natal. Como otros muchos virtuosos del instrumento, tambien Rory comenzó a rasgar la guitarra desde muy joven. Su primer instrumento fue una guitarra casi de juguete, de cuatro libras y media, que le regaló su tio cuando tenía nueve años. A la edad de 15 años, Gallagher decidió abandonar la escuela para dedicarse de lleno a la música. Apasionado del rock-blues, se vio obligado, sobre todo en los primeros tiempos, a sujetarse a las reglas de la escena irlandesa, dominada, en aquella época, por las grandes bandas. Un fenómeno claramente limitador, caracterizado por una masiva presencia de grandes orquestas de baile, que sólo podían actuar en grandes locales.

Gallagher se vio obligado a tocar primero en The Fontana Showband y despues en Impact, grupo nacido de la expulsión de varios miembros de The Fontana Showband. En 1965 le llegó una gran ocasión al separarse la banda. Rory se puso en contacto con el bajista Charlie McCraken y el batería John Wilson, para formar un trio de blues: Taste.

El trio tuvo, inicialmente, unos comienzos duros en Irlanda: los promotores no querían organizar giras para ellos orque no los consideraban capaces de divertir al público, no tanto por su tipo de música como por la escasez numérica de la banda, acostumbrados como estaban a las orquestas de quince elementos. El grupo se vio obligado a crearse un nombre primero en el extranjero, para poder tener despues tambien una cierta credibilidad en su patria. Taste, en efecto, se trasladó por algunos meses a Hamburgo, y tras un buen periodo de rodaje se volvieron a presentar en Irlanda haciendo hincapié en la difícil tarea de convencer de su calidad a los promotores. En 1969, ya seguros de su calidad, se presentaron en la escena rock-blues inglesa, trasladándose a Londres. Allí se encontraron con la abierta hostilidad de grupos ya consolidados, como Cream. A pesar de ello, Taste, aunque no poseían la habilidad ni la preparación de Cream o de Jimi Hendrix Experience, se convirtieron en una de las formaciones punteras de la escena blues-rock, gracias a su inclinación heavy.

Pero Taste, más que una verdadera banda, era una miniorganización musical al servicio de Rory Gallagher, que con frecuencia relegaba a sus dos compañeros, el bajista McCraken y el bateria Wilson, al papel de simples acompañantes. Esta situación desequilibrada llevó a la disolución del trio en 1971, tras la publicación de cuatro álbumes: Taste, On The Boards, Live Taste, Taste at the isle of Wight. McCraken y Wilson formaron con el guitarrísta Jim Cregan (que después estuvo con Family) el grupo Stud, de vida breve, y Gallagher, de regreso en Irlanda, contrató a Wilgar Campbell, batería, y Gerry McAvoy, bajo, denominando a la formación, para evitar posteriors equívocos, The Rory Gallagher Band. Con esta formación bragó tres álbumes: Rory Gallagher (1971), con la participación de Vicent Crane, el teclista de Atomic Rooster (formación en la que también militaba Carl Palmer, que después pasó a EL&P), Deuce (1972) y Live in Europe (1972), que fue el mayor éxito discográfico de Gallagher y sus socios. En 1972 la banda cambió de formación: el batería Wilgar Campbell fue reemplazado por Rod De´Ath, y el terceto se convirtió en cuarteto con la llegada del pianista Lou Martin; las dos nuevas adquisiciones procedían de Killing Floor, una formación irlandesa. Con un sonido más sólido, la banda se presentó ante el público en 1973, inmediatamente después de la publicación de Blueprint y, poco después, partió hacia una gira por Inglaterra y América que obtuvo un gran éxito.

En Navidad la banda se hallaba en Irlanda para una serie de conciertos que, como era predecible, agotaron todas las localidades, tanto en Dublín como en Belfast. De la minigira irlandesa se extrajo, por un lado, Irish Tour ´74, y por otro, el documental de noventa minutos Rory Gallagher – Irish Tour ´74.

En 1975 la compañía Chrysalis contrató a Rory, pero la colaboración fue efímera: tras la publicación de Against the Grain, Gallagher rompió el contrato. (Nota: el autor de este reportaje ha cometido un pequeño error de bulto: Rory grabó para Chrysalis cinco discos seguidos: Against the Grain, Photo-finish, Top Priority, Stage Struck y Jinx. Ha podido confundir al autor el hecho de que la hábil Polydor no paró de editar álbumes con su viejo material, para hacer la competencia a las novedades).

A pesar de la reputación de duro que se había ganado en la época de Taste, Gallagher es descrito por sus colaboradores y amigos como un irlandés pacífico, gentil y muy dotado. Su estilo, influido por algunos de los mejores guitarrístas de blues, como B.B.King y Albert King, lo llevó a ser considerado como uno de los mejores guitarrístas rock de la época. Mientras que el estilo del grupo era definido en pocas palabras, como rock-blues, en realidad la música de la banda era una sabia mezcla de influencias rock, con fragmentos duros y virtuosismos guitarrísticos, y de blues, clásico y urbano.

Gallagher siempre ha sido pintado por sus colegas como el emblema de la honestidad y la pureza, por su capacidad de no ceder a las exigencias de las compañías discográficas. Por ninguna razón había abandonado jamás sus jeans descoloridos, su guitarra maltrecha y su habitual camisa, emblemas ricos en significados profesionales y humanos para él; la voluntad de no olvidar sus raíces humildes y la honestidad de fondo de los guitarrístas blues. Es muy importante, a este respecto, su colaboración en 1972 con Muddy Waters, de quien era un verdadero fan. De nuevo con polydor, a finales de 1975, grabó Sinner… and Saint seguido en 1976 por The Story So Far.

A finales de 1976 volvió a Chrysalis para grabar Calling Card, mientras que Polydor publicaba la antología The Best Years. En 1978 salió a la luz Photo-finish, seguido en 1979 por Top priority, en 1980 por Stage Struck y en 1982 por Jinx. Con el inicio de los años ochenta la estrella de Gallagher se fue apagando: el mundo del rock abandona el interés por la mezcla con el blues y los nuevos enrolados en el «star system» inician su camino hacia el éxito anteponiendo, con una estrategia totalmente contraria a la de Rory, el look a la música. Ante esta situación Gallagher decide proseguir actuando en pequeños conciertos con frecuencia improvisados.